Los tipos de
letra, todos, tienen su personalidad, ejercen su influencia sobre el mensaje,
transmiten. La
gótica, por ejemplo, le confiere al texto una antigüedad que
seguramente no posee.
La Juice ITC está buena para los globos en las historietas.
Cada una de
ellas cumple su función.
Ahora hay una,
especialmente una, la magneto que encierra otras propiedades.
La magneto es una letra que nadie invoca por su verdadero nombre.
La utilizan
los políticos para escribir las ideas medulares de sus discursos. La emplean los
periodistas a destajo por orden de sus superiores o por la influencia de una bien vista incentivación
económica. Algunos cheques se emiten con ella como si fuese una firma.
La magneto, le sienta bien al empresario especulador, le hace juego
con el traje y la corbata, con el anillo y los gemelos.
Es un recurso
de ciertos comunicadores cuando se hacen los amigos de la Patria rural para sembrar pánico y
confusión.
Es una letra
de molde, que como su definición lo indica, moldea hasta el absurdo algunas
mentes flojas, acostumbradas desde chicos a verla impresa en sus libros de
lectura obligatoria.